Un reciente estudio sobre la perspectiva de los almacenes, elaborado por Zebra, los responsables de la toma de decisiones en estos entornos de trabajo se centran en los resultados operativos durante las primeras fases de la modernización del almacén. Esto incluye la adopción de soluciones básicas de código de barras y movilidad que ayudan a aumentar el control de las operaciones empresariales mediante la mejora de la productividad individual de los propios trabajadores.
No hay duda que las nuevas tecnologías, desde un punto de vista práctico, aumentan la productividad y ayudan a mantener un máximo rendimiento en los almacenes. En un contexto como el actual, los consumidores están acostumbrados a las opciones de entrega al día siguiente o en el mismo día cuando compran online. Y si un competidor les ofrece el mismo artículo antes, es probable que recurran a él.
Este cambio en la industria, combinado con la escasez de mano de obra, puede hacer que las operaciones en almacenes sean algo más complicadas. Es importante que los operadores de almacenes entiendan cómo encaja la automatización en los objetivos estratégicos de sus organizaciones antes de implementar cualquier nueva tecnología.
Cómo modernizar almacenes
Uno de los primeros pasos en el camino hacia la modernización es la eliminación de los procesos en papel. Con el volumen y la velocidad actual de ejecución de los pedidos, dotar al personal de herramientas digitales para gestionar órdenes de trabajo es muy importante. Favoreciendo que las listas de recogida y traslado, el embalaje, la puesta en marcha y el envío sean más eficientes y dinámicos.
La forma más sencilla de hacerlo es mediante dispositivos manuales, tablet u otros equipos montados en vehículos. También encontramos dispositivos móviles portátiles, diseñados ergonómicamente para llevarlos por ejemplo en el antebrazo y que utilizan pantallas táctiles y teclados para facilitar los flujos de trabajo.
También existen escáneres de anillo, que permiten recoger datos y verificar artículos de forma sencilla y sin necesidad de usar las manos. Otra solución tecnológica es la robótica. Los robots inteligentes tienen muchas formas y tamaños en función de su uso y, cada vez más ofrecen soluciones de robótica como servicio.
Esto facilita a las empresas el aumento o disminución de sus inversiones en función de las necesidades de negocio. La forma más popular de robótica para almacenes son los robots colaborativos o robots móviles autónomos que ayudan a mover los productos en el almacén, ahorrando tiempo y energía a los trabajadores.
Los operarios de almacén que dispongan de un software de gestión de almacenes moderno pueden aprovechar las ventajas de las tecnologías de movilidad y escaneado con relativa rapidez.
Los operarios de almacén que estén preparados para modernizarse descubrirán que hay muchas opciones que se adaptan a las necesidades de sus empresas y aseguran un rápido retorno de la inversión.
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