En 2022, las exportaciones de zonas francas totalizaron US$7,832.8 millones, de acuerdo con el “Informe estadístico de zonas francas 2022” del Consejo Nacional de Zonas Francas de Exportación de República Dominicana (CNZFE).
Tal como recuerda en su publicación El Dinero, ese año se alzó con la cifra más alta en casi dos décadas. Los datos establecen un aumento de 9.1% respecto al 2021, cuya cantidad de US$7,179.6 millones es la segunda mejor del inventario.
A esta le siguen 2019 con US$6,249.5 millones, 2018 con 6,035.2 millones y 2020 con 5,894.5 millones, completando así el “top 5” de mayores montos en divisas alcanzados por ese sector en exportaciones.
En el caso del año de la pandemia del coronavirus, 2020, aunque tiene la quinta posición de mejores cifras en la selección del CNZFE, presentó una variación interanual de -5.7%.
Desde 2014 a 2017 se ubican las exportaciones en ese sector que superaron los US$5,000 millones. En 2014 se lograron US$5,261.7 millones y en 2015 un monto de US$5,423.6 millones, mientras que en 2016 y 2017 se alcanzaron US$US$5,503.9 millones y US$5,709.6 millones, respectivamente.
En el período 2003-2008, así como 2010-2013 las exportaciones de zonas francas ascendieron a US$4,000 millones, resaltando el 2013 con el mayor valor en ese grupo (US$4,976.4 millones) y 2010 con el menor (US$4,194.4). Según los datos, 2009 fue el peor año en ventas externas, con US$3,793.5 millones.
Zonas francas apuestan por la manufactura 4.0
Los parques industriales de zonas francas se vuelven más atractivos para empresas multinacionales que desean relocalizar sus fábricas. Son el principal aliado de República Dominicana (RD) para atraer a las empresas de otros continentes que buscan ubicarse en Centroamérica y el Caribe, como parte de la reconfiguración de las cadenas de suministro.
El gran reto ahora es ofrecer operaciones digitalizadas. Esta es una gran oportunidad, no sólo para la media isla, sino también para Centroamérica, a juicio de Gustavo González de Vega, presidente de la Asociación de Zonas Francas de las Américas (AZFA). Estamos en una etapa en la que las empresas “están valorando relocalizarse en lugares que estén cerca de su proveedor y su destinatario final”, considera.
Tal como publica Forbes, el reto para RD es que más compañías logren certificaciones de seguridad como la denominada Operadores Económicos Autorizados (OEA), que garantiza que los procesos de la fábrica son seguros y que, tanto sus controles como procedimientos, son suficientes para acreditar el cumplimiento de la normativa aduanera.