Una nueva etapa parece abrirse en el mercado del transporte marítimo internacional a medida que se va confirmando la continuidad de las polémicas alianzas navieras, aunque en nuevos términos y adaptadas a priori a los nuevos marcos legales.
Estos movimientos se producen en un momento de alta incertidumbre y fuerte inestabilidad, con fletes a la baja en las principales rutas que parten de Asia, especialmente hacia Europa y la fachada este de los Estados Unidos, tensiones laborales en los puertos norteamericanos y una demanda que no acaba de recuperarse del todo, ni siquiera de cara a las vacaciones de octubre en China. En este contexto, Linerlytica calcula que la congestión portuaria mundial se recorta levemente hasta colocarse con un porcentaje de un 8,2% de la flota total, con una capacidad de 2,49 millones de TEUs.
Así mismo, la consultora estima que el volumen de flota ociosa mantiene durante la trigésimo séptima semana de este año un nivel mínimo de un 0,3% con un total de 91.407 TEUs repartidos en un total de 39 buques.
Por otro lado, la consultora estima que en los últimos treinta días se han incorporado al mercado un total de 35 portacontenedores con una capacidad total de 268.088 TEUs, mientras que, al mismo tiempo, se ha retirado de la navegación una embarcación con 1.730 TEUs de capacidad.