El Gobierno de Honduras celebró la derogación por la Corte Suprema de Justicia (CSJ) del marco normativo de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDES), el cual considera un atentado contra el equilibrio entre inversión y bienestar del pueblo hondureño, así como contra la soberanía del país centroamericano.
Tal como publica Agencia Xinhua, por mayoría de votos, la CSJ de Honduras declaró la inconstitucionalidad del decreto 236-2012 sobre la reforma a los artículos 294, 303 y 329 de la Constitución hondureña, y del Decreto 120-2013, que contiene la Ley Orgánica de las ZEDES, «con efectos nulatorios por vulnerar artículos pétreos». La presidenta de la CSJ, Rebeca Lizette Ráquel Obando, destacó en su cuenta de la red social X que la decisión tomada por el máximo tribunal con jerarquía del Poder Judicial de Honduras es «un avance importante en la defensa de nuestro Estado de derecho y la soberanía nacional con la derogación de las ZEDES».
Explicó que las ZEDE, en su implementación, «suscitaron preocupación sobre la capacidad del Estado para ejercer plenamente su autoridad en determinadas zonas del país, así como sobre el equilibrio entre la promoción de la inversión y el bienestar de nuestra gente».
«La derogación de este marco nos brinda una oportunidad para replantear estrategias de desarrollo que beneficien de manera equitativa a la población, respeten nuestras instituciones y fomenten la transparencia. Estamos comprometidos en garantizar que todos los actos y normativas futuras respeten el principio de legalidad y contribuyan al crecimiento sostenible del país, siempre en armonía con los derechos fundamentales de nuestra nación y su pueblo», agregó.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, también se pronunció en la referida red social sobre la decisión de la CSJ. «Celebramos y reconocemos la patriótica, histórica, justa y legal decisión de la CSJ», escribió la mandataria, al tiempo que ponderó que el marco normativo que regía la existencia y funcionamiento de las ZEDES vulneraban artículos constitucionales relacionados con la soberanía de Honduras.
«La justicia para el pueblo hondureño es no vender nuestro territorio en partes ni privatizar nuestra soberanía», sentenció la presidenta hondureña. Las ZEDE en Honduras son áreas especiales creadas bajo un marco jurídico único que permite un alto grado de autonomía en aspectos fiscales, administrativos y legales con el fin de atraer inversión extranjera y promover el desarrollo económico.
Las zonas han sido objeto de controversia desde su creación. Críticos argumentan que las ZEDE socavan la soberanía hondureña, ya que permiten la aplicación de leyes distintas a las del resto del país y otorgan amplios poderes a inversionistas privados.
Además, existen preocupaciones sobre la falta de consulta previa con las comunidades afectadas, el impacto ambiental, y los posibles riesgos de convertir a las ZEDE en paraísos fiscales o en espacios que faciliten actividades ilícitas.