Este 16 de agosto, el petróleo habría llegado a la cifra más baja no vista desde febrero, debido a la posibilidad de que tenga lugar un aumento de las exportaciones de crudo iraní y en medio del empeoramiento de las perspectivas del crecimiento económico mundial.
El WTI cayó de manera sorprendente a principios de febrero, en una sesión volátil y sin negociaciones. Unas conversaciones entre el exportador Irán y la Unión Europea confirmaron un nuevo acuerdo nuclear podría abrir las puertas a las exportaciones islámicas.
Datos económicos de Estados Unidos, ya confirmaban una baja en las cifras del WTI, debido a déficit en el sector manufacturero. Además, datos provenientes de China, confirmaron la misma situación y estaría provocando una gran preocupación por posible escasez de suministros petroleros.
“La posibilidad de un acuerdo está siendo incorporada a los precios, lo que crea un riesgo de dos vías para el precio del petróleo si se produce un anuncio final esta semana”, dijo Craig Erlam, quien es analista de mercado senior de Oanda.
Además agregó que “el principal motor de la debilidad, que podría mantener los precios en torno a los US$90 o menos, es la amenaza de recesión en todo el mundo y los confinamientos en China”.
La modificación a las sanciones que tenía Irán podría liberar aproximadamente, 1,3 millones de barriles de petróleo al día, aseguró el jefe de estrategia en materias primas de ING Bank, Warren Patterson.