Ecuador es una de las economías dolarizadas en Latinoamérica desde el año 2000, razón por la cual los cambios en la moneda, en subida o bajada, afectan directamente a la región.
Las exportaciones están siendo más costosas en el destino final; las importaciones por su lado, siendo menos costosas no recuperan las pérdidas de competitividad de los productos que salen del país.
El presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportaciones, Felipe Ribadeneira, afirma que la dolarización implicaba mucha disciplina fiscal, una apertura económica a través de acuerdos comerciales y trabajar fuertemente la competitividad, acuerdos no han sido cumplidos y fiscalizados en Ecuador.
«Estamos muy preocupados, porque estamos viviendo momentos que no se habían visto en las ultimas dos décadas, es decir una precisión del dólar tan fuerte, como la que está sucediendo. Si nosotros en estos momentos con el dólar fuerte, tendríamos un acuerdo comercial con Estados Unidos y tendríamos un incremento de exportaciones de los Estados Unidos, de alguna manera podríamos paliar el efecto.» agregó Felipe Ribadeneira.
Con la subida del dólar, los productos ecuatorianos se vuelven mucho más caros en el extranjero sino también, se vuelve más caro con respecto a los productos de sus competidores. Teniendo en cuenta la inflación que está afectando a las monedas de todos los países latinoamericanos.
Las importaciones por otro lado, Ribadeneira cree que hay poca circulación ante la crisis económica en la que se encuentra Ecuador, la inversión se ha visto ahuyentada por el paro que ha retenido mucho dinero para trastornar.
¿Qué tendría que hacer el país para combatir esta crisis económica? Ribadeneira sugiere que «trabajar muy fuertemente en mejorar la competitividad interna, evitar sobrecostos, tramitologías innecesarias. El Gobierno tiene mucho trabajo por hacer, tratar de hacer la exportación cada día más fácil y menos costosa.» Además de conseguir acuerdos comerciales con Centroamérica y Estados Unidos.
Finalmente, sugiere imponer una menor carga interna en impuestos y emitir certificados de abonos tributarios para los sectores más afectados ante el alza del dólar y las manifestaciones, como son los sectores de las flores, frutos y hortalizas, congelados, etc.