El Informe sobre el transporte marítimo 2023 de la Unctad incide en la necesidad del sector por contar con combustibles más limpios, soluciones digitales e impulsar una transición equitativa para combatir las continuas emisiones de carbono y la incertidumbre normativa en esta actividad.
Según el documento, el sector del transporte marítimo representa más del 80% del volumen del comercio mundial y casi el 3% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, con un aumento de las emisiones del 20% en tan solo una década.
En este contexto, el organismo internacional concluye que el proceso de transición a combustibles más limpios se encuentra en una etapa incipiente, con casi el 99% de la flota mundial todavía dependiente de los combustibles convencionales, aunque, al mismo tiempo, también se registran avances prometedores, como el hecho que 21% de los buques bajo pedido estén diseñados para emplear combustibles alternativos.
Descarbonización y gasto en combustible
Sin embargo, la transición conlleva costes considerables. En concreto, la Unctad calcula que se necesitarán entre 8.000 y 28.000 millones de dólares anuales adicionales para descarbonizar la flota de aquí a 2050.
Así mismo, la entidad también contempla inversiones aún más cuantiosas, de entre 28.000 y 90.000 millones de dólares anuales, para desarrollar una infraestructura de combustibles 100% neutros en carbono de aquí a 2050.
Como consecuencia, la descarbonización total podría elevar los gastos anuales de combustible entre un 70% y un 100%, por lo que se aboga por un marco normativo universal aplicable a todos los buques, con independencia de su pabellón de registro, propiedad o zonas de operación, evitando así un proceso de descarbonización a dos velocidades y manteniendo la igualdad de condiciones.
Flota más envejecida
Por otra parte, el informe también constata un envejecimiento de la flota naviera mundial, de tal modo que a principios de 2023, los buques comerciales tenían una edad media de 22,2 años, dos años más que hace una década, y más de la mitad de la flota mundial tiene más de quince años.
Así pues, los armadores se enfrentan al reto de renovar la flota sin claridad en cuanto a combustibles alternativos, tecnología verde y regímenes reguladores que guíen a los armadores y a los puertos, mientras que las terminales portuarias se enfrentan a retos similares en decisiones vitales de inversión.
Perspectivas de crecimiento
Por lo que respecta a la evolución del mercado de transporte marítimo mundial, la Unctad registra una contracción del 0,4% en los volúmenes totales de comercio marítimo en 2022 y un crecimiento del 2,4% en 2023.
De manera particular, el tráfico mundial de contenedores crecerá un 1,2% en 2023 y más del 3% entre 2024 y 2028, tras haber caído un 3,7% en 2022. A su vez, los volúmenes de transporte de petróleo y gas han mostrado un sólido crecimiento en 2022, mientras que los fletes de los petroleros experimentaron un fuerte resurgimiento impulsado por los acontecimientos geopolíticos.
Mientras, los fletes de graneles sólidos han estado sometidos a una gran volatilidad debido a los cambios en la demanda, la congestión portuaria, las tensiones geopolíticas y las perturbaciones meteorológicas.
Tanto en los tráficos de graneles sólidos, como líquidos, la invasión rusa de Ucrania ha supuesto trayectos más largos.
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