El Salvador es el segundo país de la región con la inflación más baja sólo antecedido por Costa Rica, según los datos del Consejo Monetario Centroamericano. Sin embargo, este número no es sinónimo de que los precios de los productos sean más bajos en El Salvador.
Más bien, publica El Economista, es un indicador de la oferta de dinero, que está muy ligada a las políticas monetarias de cada país. Según las estadísticas , a abril de este año El Salvador tenía una inflación interanual (de abril 2023 a abril 2024) de 1.15%, mientras que países vecinos como Honduras, Guatemala y Nicaragua, superan el 3% de inflación. Costa Rica tiene una inflación negativa de 0.52% y Panamá, una de 1.67%. Según explicó el economista José Luis Magaña, aunque el dato de El Salvador es mejor que el resto de países, esto ha sido así desde que el país se dolarizó.
“Generalmente El Salvador ha tenido inflación mucho más baja que el resto de vecinos, sobre todo por ser una economía dolarizada porque en última instancia, la oferta de dinero no depende de decisiones políticas, sino de los flujos que son sostenidos por las remesas”, indicó.
“Al no haber esa variación, en general, los indicadores de El Salvador han estado más por debajo de los promedios de la región”, afirmó Magaña. Panamá, que también es una economía dolarizada, es la tercera con la inflación más baja de la región y por su lado, Costa Rica, tiene números negativos (deflación) que se han mantenido por más de 11 meses y que, lejos de ser un alivio para el bolsillo de los consumidores, representa una alerta para los economistas, pues indica un enfriamiento de las actividades económicas, el consumo y la producción.
Magaña explicó que en el caso de Honduras, Guatemala y Nicaragua, su variabilidad monetaria da una mayor movilidad de sus indicadores. Además, Magaña explica que el indicador de la inflación no significa que los precios están bajando sino más bien que los precios siguen subiendo, aunque en menor proporción.
“Mientras el indicador de la inflación sea mayor a cero, nos indica que los precios están subiendo. Si el número es pequeño, significa que sube poquito. El único indicador que nos diera la inflación para decir que los precios bajan es que fuera negativo”, afirmó.
De igual forma, la inflación ‘per sé’ no ayuda mucho si el nivel de precios ya está elevado. La cifra también se analiza a partir de los términos productivos del país pues según Magaña, al tener una economía tan abierta, El Salvador depende mucho de las importaciones y se trae “un precio importando” que termina siendo el que se coloca a la venta en los diferentes negocios.
Magaña espera que este año los precios de los productos se mantenga para que el precio de la canasta básica no se dispare y afecte a los hogares.