Honduras y Nicaragua mantienen debate por limites marítimos

El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, argumentó que el tratado sobre los límites marítimos firmado con Nicaragua en octubre de 2021, “está en estudio”, pero con un cuidadoso análisis.

“Independientemente del Tratado suscrito con Nicaragua, no están en disputa o discusión, una vez analizado dicho Tratado se enviará al Congreso Nacional”, declaró a Hondudiario. Además, Enrique Reina, consideró inaudito el querer politizar o polemizar un asunto tan serio y delicado cómo los límites soberanos de Honduras.

El jefe de la diplomacia hondureña reiteró que el tratado está bajo estudio para su eventual envío a ratificación. Según el canciller, claramente y sin duda que los límites y derechos soberanos, históricos y jurídicos de Honduras en el Océano Pacífico y el Golfo de Fonseca “fueron reconocidos por la Sentencia de la Corte de La Haya del 11/9/1992 y ratificados mediante el fallo de la Revisión a la solicitud presentada por El Salvador del 18/12/2003 y son por lo tanto ´Res Judicata´”.

Los gobiernos de Nicaragua y de Honduras acordaron definir sus fronteras en el Mar Caribe y en el Océano Pacífico, incluyendo el Golfo de Fonseca que comparten con El Salvador, país ausente de la firma.

El acuerdo de límites, denominado “Tratado Integracionista del Bicentenario”, fue suscrito en Managua por el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y su homólogo de Honduras en ese entonces, el expresidente Juan Orlando Hernández, en un acto público pocos antes de terminar su mandato.

Durante la firma del tratado en octubre del 2021 por Honduras y Nicaragua, el mandatario nicaragüense Ortega, al leer el conjunto comunicado, dijo que “tiene como objetivo principal trazar una ruta de paz y prosperidad en nuestros pueblos y mediante el cual ambos países delimitan sus fronteras en el Mar Caribe y el Océano Pacífico”.

“Al firmar este Tratado, Nicaragua reconoce que su frontera marítima en el Golfo de Fonseca es con la República de Honduras, ratificando de esta forma el fallo dictado en el año 1992 por la Corte Internacional de Justicia (CIJ), de La Haya”, de acuerdo con el documento.

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